En la biblioteca del CEIP Chano Piñeiro van muchos niños, pero hay unos en especial que siempre van, esos niños son: Lydia, Ángela, Blanca y Eva, les encantan los libros y son divertidísimas.
El martes quedaron para hacer un trabajo de coñecemento, pero Lydia empezó a leer un libro que como ella decía era tan divertido como un gato bailando breakdance.
Las otras tres enfadadas le dijeron que dejara eso en su sitio. Al ir a coger un libro para el trabajo Eva tiró de el que llevaba y ante ella se abrió un pasadizo grande e iluminado con antorchas de madera.
Las amigas pasaron, y el pasadizo acabó en su clase. A partir de ese día las cuatro amigas decidieron que ese sería su lugar secreto, y cuando no le gustará un libro de clase cogerían otro.
Ese había sido un día raro, pero divertido.
